En procesos industriales en los que se necesita utilizar aire comprimido, es fundamental contar con elementos que eliminen de este los contaminantes que puedan perjudicar al proceso, como por ejemplo el agua. Para realizar este procedimiento, se utilizan secadores de adsorción, de los que hablaremos en el siguiente artículo.
El agua es uno de los contaminantes más comunes en el aire comprimido. El vapor de agua se condensa en las redes de aire y debe eliminarse dependiendo del porcentaje y de la aplicación industrial para la que se utilice.
En los secadores de adsorción, como su propio nombre indica, se utiliza el método de adsorción para eliminar las partículas de aire que pueda haber en el aire comprimido. Con la adsorción se consigue atraer la molécula del agua cuando pasa por un lecho desecante. Este se presenta en forma de bolitas porosas que retienen el agua en la superficie dejando que el aire comprimido pase sin problemas.
De esta manera conseguimos un grado alto de sequedad, dependiendo de las necesidades específicas del proceso industrial que se esté llevando a cabo. En el caso de los desecantes que incorporan los secadores de adsorción, podemos distinguir dos tipos muy habituales. Por un lado, Alúmina Activa y por otro Tamiz Molecular.
El proceso de secado de los equipos de adsorción se divide en dos fases. Por un lado, la de adsorción propiamente dicha, que es en la que el aire comprimido pasa por el lecho desecante para que el agua se elimine hasta el punto deseado. Por otro, la fase de regeneración o desorción, en la que el desecante saturado de humedad se libera del agua para que siga con su proceso de adsorción.
Sea cual sea el caso, en Folch Técnica Industrial ponemos a su disposición todo lo que necesita en cuanto a desecadores de adsorción. Póngase en contacto con nosotros para más información.